RAÍZ HUMANA DE LA CRISIS ECONÓMICA
El Papa invita a llegar o conocer las raíces de
una situación actual de manera que no solo miremos los síntomas básicos sino también
las causas más profundas.
El
centro de este capítulo se puede resumir de una manera breve con la siguiente
frase: “no hay ecología sin una adecuada antropología”. La tecnología, las
ciencias aplicadas, la indagación, la creación y el esfuerzo son cuestiones que
tiene como intérprete principal al ser humano. La progresiva preocupación por
temas como el medio ambiente en todo el mundo lleva a conocer tanto el
compromiso del hombre por los abusos que ha hecho el ambiente como la necesidad
que tiene el mismo de buscar soluciones a problemas ecológicos.
El
Papa valora, aprecia o estima la importancia y la necesidad del desarrollo de
las nuevas tecnologías, pero ante esto hace notar también que hay secuelas,
resultados o consecuencias negativas sobre el ambiente y la familia. La tecnología
y la ciencia no son capaces de asegurar por si solas el progreso, el aumento de
seguridad, el bienestar, plenitud de valores, etc. Porque en realidad la tecnología
solo busca poder económico.
La historia ha demostrado
que el hombre moderno no está preparando para utilizar el poder con acierto,
puesto que el crecimiento acelerado de las tecnologías no ha sido acompañado de
un ser humano con valores, responsabilidad y conciencia.
Por último, el Papa invita
a reflexionar sobre el desarrollo con otra mirada y que esta sea capaz de ver
la conexión del progreso de la humanidad con el servicio que presta al mundo.